Por David Lorenzo

En ocasiones puede parecer que la inquisición fue una institución que únicamente estuvo presente en las islas de realengo (Gran Canaria, Tenerife y La Palma). Pero nada más lejos de la realidad. Ciertamente cuando se estableció la sede del Santo Oficio en Las Palmas de Gran Canaria su objetivo era el de hacer, habitualmente, una visita por todas las islas con el fin de detectar y condenar a “herejes”.

Por ello la inquisición en Fuerteventura no fue una excepción. Una de las mejores características del Santo Oficio era que, generalmente, se recogía de forma muy meticulosa la información sobre los “supuestos pecadores”. Todos los datos eran guardados por escrito. En ellos encontramos desde los orígenes del condenado (donde había nacido, qué había dicho, etc.). También se dictaba acta de todo lo que comentaba en los juicios y durante las torturas.

Con toda esta información se intentaba encontrar algún comentario que pudiese incriminarlo y así condenarlo. Gracias a ello tenemos hoy en día una gran información sobre los acusados por la inquisición, incluyendo la canaria. Uno de los casos más sonados de la inquisición en Fuerteventura tuvo lugar en 1728 contra el Alcalde Mayor, Don Jerónimo Falcón.

Falcón era una de las personalidades más influyentes de la isla. Esto sin duda no ayudó a resolver las cosas. Por si esto fuera poco, al tratarse de una isla de señorío (propiedad de un noble, con su propia jurisdicción) se dificultaban las cosas. No solo se estaba en un “territorio hostil” sino también se tenía que acusar a una persona cercana al señor propietario de Fuerteventura.

Además la inquisición en Fuerteventura apenas tenía influencia. La sede central estaba en Gran Canaria. De manera que era necesario enviar desde ella tanto a un comisario (para que investigara el caso) y a un notario (para que hiciera acta de todo). El denunciante era Sebastián Truxillo Umpiérrez, beneficiado de Fuerteventura y que también era notario del Santo Oficio y que acusaba a Falcón de injurias.

Suena extraño que alguien demandase en el Santo Oficio  por injurias. Sin embargo Sebastián Truxillo sabía que era la única manera de poder defenderse ante el Alcalde Mayor. Era consciente de que en caso de demandarlo ante la justicia señorial, paradójicamente, el juez sería el propio Falcón. De esta forma casi puede decirse que esta fue una acción desesperada del beneficiado para protegerse.

Claramente Sebastián Truxillo consiguió que estuviese la inquisición en Fuerteventura porque él también era miembro de la misma. Por lo general, cuando una persona formaba parte del Santo Oficio solía ser muy privilegiada. De forma que, aunque este caso no estuviese dentro de las competencias penales de la inquisición, se aceptó el proceso de investigación.

Durante muchos meses la pequeña comisión enviada para tratar el caso de la inquisición en Fuerteventura estuvo interrogando a los testigos. Se tardó tanto tiempo en las entrevistas no solo por lo meticuloso que debían ser. Sino también porque la comisión debía tener el permiso directo del Santo Oficio para continuar con el proceso.

Todo parecía indicar, tras los interrogatorios, que Truxillo tenía razón cuando decía haber sido difamado por Falcón. Al menos así lo confirmaban algunos testigos con los que pudo hablar la comisión. Sin embargo el tribunal de la inquisición, a pesar de las pruebas, no parecía muy interesado en llegar a una resolución final sobre este juicio.

Los motivos, aunque no están del todo claro, parecen ser el miedo que tenía el Santo Oficio a tener conflictos con una isla de señorío. Preferían no enfadar al señor ni a su Alcalde Mayor ante un juicio en el que ellos carecían de cualquier competencia. Finalmente parece que este juicio no llegó a nada. Al menos no existe información ninguna de que existiese una condena contra los señores de Fuerteventura.

Para saber más:

  • Manescau Martín, María Teresa (1999) “La Inquisición en el señorío oriental: La acción del Santo Oficio contra Jerónimo Falcón, Alcalde Mayor de Fuerteventura”. En VIII Jornadas de Estudios sobre Lanzarote y Fuerteventura. Arrecife: Cabildo de Lanzarote; Cabildo de Fuerteventura. Enlace: https://goo.gl/gFZC4C