Por David Lorenzo

La Catedral de Santa María o Primada de España se encuentra construida en estilo gótico (en su mayoría). Del edifico destacan bastante sus bellas vidrieras, que por su cantidad y calidad son las mejores de España. Las más antiguas datan de los siglos XIV y XV. Otras fueron construidas en épocas más recientes.

Estas bellas vidrieras toledanas, sin embargo sufrieron una importante degradación durante la Guerra Civil Española. El asedio realizado por la República para recuperar la ciudad tuvo su efecto. Gran parte de las cristaleras se rompieron durante el bombardeo del Alcázar de la ciudad, que quedó convertido en una ruina.

Muchas de las vidrieras perdieron parte de sus composiciones, lo que exigía una restauración cuanto antes. La primera intervención que se tuvo que realizar para su recuperación fue trabajo del artista, de origen canario, Gregorio Toledo. Esta tuvo lugar poco antes de que acabar la Guerra Civil, que supuso la victoria del bando nacional o franquista.

Destacar que los recursos eran escasos, de manera que Gregorio Toledo rehabilitó aquellas vidrieras en peor estado y más importantes del templo. El resto no fueron restauradas hasta la segunda mitad del siglo XX.

Nació este artista con el nombre de José Gregorio Toledo Pérez en el municipio palmero de Mazo en 1906. Estudió en la Escuela de Artes y Oficios de Santa Cruz de La Palma (actual Escuela de Arte Manolo Blahnik). Posteriormente se trasladó a Madrid, donde siguió formándose en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando. Fue a ella ayudado con una beca aportada por el Cabildo de su isla natal.

Aunque el Cabildo le daba dinero para ayudarle la cantidad era insuficiente. Pronto Gregorio Toledo se vio obligado a buscar un trabajo para poder sufragarse sus estudios. Uno de sus primeros trabajos fue como pintor de vidrios en la empresa Vidrieras Maumejean, localizada en Madrid.

Su extraordinaria mano para el arte hizo que pronto se convirtiese en un prestigioso artista a nivel nacional. Ocupó varios cargos como profesor (en el Instituto Ausias March de Barcelona, profesor de dibujo en el Instituto de Toledo, etc.). Gracias a sus dotes para el arte ya en 1954 era Catedrático numerario de Preparatorio de Colorido de la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando.

Contó Gregorio Toledo con innumerable cantidad de premios y obras de él están por toda España (en su propia isla, así como en museos de Toledo, Madrid, Barcelona, Málaga, etc.). También en algunas colecciones privadas dentro y fuera de España.

Gregorio Toledo hizo amistad con muchos de los intelectuales y artistas de la época. Así se sabe que fue amigo del jurista y politico (republicano) Luis Jiménez de Asúa, del escritor Joaquín de Entrambasaguas. También entabló amistad con la filósofa María Zambrano y con el escritor Federico García Lorca, entre otros. Como no podía ser de otra manera también conoció a otros grandes artistas con los que estudió como Rafel Pellicer, Joaquín Valverde y un largo etcétera.

Durante 1939 y 1941 tanto el artista como su familia estuvieron viviendo en la ciudad de Toledo. Él trabajaba restaurando vidrieras en la torre de la catedral. Durante su trabajo tuvo varios momentos en los que no se le pagaba demasiado. Cansado de tantos problemas para poder cobrar su trabajo decidio volver a Madrid.

La pérdida de esta obra supuso para la famiia de Gregorio Toledo un duro varapalo económico. Tan grave fue la situación famliar que finalmente se ve obligado a volver, junto con su familia, de nuevo a La Palma. Pero no tardan en volver a darle empleo. Esto le lleva a marcharse a toda prisa de nuevo de la isla para aceptar una beca que le habían dado una vez se entera. Vive en Madrid hasta su muerte en 1980.

Así acaba la historia de Gregorio Toledo en su restauración de las vidrieras de la Catedral de Toledo. La que podría haber sido una de los grandes trabajos del artista finalmente se convirtió en un pequeño trabajo que ha pasado desaprecibido durante décadas en su importante currículum.

Para saber más:

  • Hernández Pérez, María Victoria (2009) El canario Gregorio Toledo y la restauración de las vidrieras de la Catedral de Toledo. Las Palmas de Gran Canaria: Asociación Cultural Bienmesabe. Enlace: https://goo.gl/heQSDn