Por Esther Mendoza

Fotografía por Eduardo J. Castro

Rubén Cubas Castilla, cree en el ser humano por concepto, su entrega incondicional, generosidad y altruismo, así lo describe.

Entre los renglones de Relatos con amor espera colarse en los corazones y rincones de muchos hogares cuyas respuestas cubran sus expectativas, que no son otras que las de ayudar a aquellos  que menos tienen. Podemos decir que Rubén es un hombre feliz, que comparte su proyecto de vida. Un soñador que logra sus metas…

¿Quién es Rubén?

Un humano inquieto, que sólo descansa cuando duerme y no para de soñar cada vez que despierta. Siempre consciente de que nuestra energía positiva es muy abundante y uno de los mejores regalos que podemos hacer a quienes nos rodean.

¿Qué te inspiró para escribir Relatos con amor?

Por un lado, el compromiso con la transmisión de los valores humanos que me han legado mis antepasados. Personas humildes y  trabajadoras, encargadas de sobrevivir de forma coherente y respetuosa en La Gomera.  El segundo, la presencia e influencia de Eduardo J. Castro, un artista con cámara fotográfica en mano, sus cincuenta y dos imágenes en la obra dan fe de ello, y un amigo con el que he tenido la suerte de compartir esta grata experiencia desde el minuto uno.

Rubén

¿Por qué ese título?

El amor es el único sentimiento que puede salvarnos de nuestra autodestrucción.

¿Cuál es el objetivo de esta obra?

Ayudar económicamente, mediante la donación de la totalidad de los beneficios que me corresponden por su autoría, a la Asociación Española contra el Cáncer, con la que colaboro desde hace casi una década, a Educa Nepal, gracias a su maravilloso trabajo han devuelto la dignidad a miles de niños en situación de riesgo y a Greenpeace.

¿Qué parte de  Rubén podemos encontrar en tu libro?

Muchas. He sido una especie de demiurgo que ha intentado unir abundantes piezas, emanadas del conocimiento heredado de humanos de gran corazón que pisaron este planeta antes que nosotros, para obtener una especie de rompecabezas desordenado.

Hablamos de éxito y poco del fracaso, ¿qué significan para ti estas dos palabras?

Simplemente dos palabras llenas de acepciones. El éxito consiste en despertar cada mañana y hacer lo que me gusta ¿El fracaso? Si seguimos aprendiendo incesantemente a valorar lo sencillo no nos tendría que preocupar ese vocablo.

¿Estás de acuerdo en qué, en ocasiones, la vida se convierte en un supermercado de emociones donde otros están destinados a hablar de ellas?

Sin lugar a dudas, somos seres dotados de mucha sensibilidad. Nuestros cinco sentidos, un corazón y un cerebro como el que tenemos dan para mucho. Y si sumamos los de los millones de personas que nos rodean y los de los que estuvieron aquí antes que nosotros, hay mucho que contar mediante las letras.