“Más allá de su icónica figura como artista, su forma de dejar huella en el mundo de la moda, sus discos, la cantidad de premios y reconocimientos que acumuló, estaba una persona, la Amy que no necesitaba de la fama”

“La imagen que quedó de Amy Winehouse es la de una mujer repleta de tatuajes. Pero la leyenda popular no es del todo cierta. La cantante solo tenía once tatuajes”