Por Carlos Fuentes

Grandes especies como el pez emperador o el mero y mariscos y pescados de bajura se degustan fritos o a la plancha. Restaurantes y puestos callejeros abundan, aunque algunos, por tradición y calidad, reúnen a vecinos y viajeros. En Praia, capital y principal ciudad de Santiago, se disfruta de las morenas al modo caboverdiano: bien fritas y, atención, picantes. Cada tarde en su pequeño puesto de la calle Xandade, en el corazón de Achada Santo Antonio, la señora Julieta no para de freír hasta medianoche. “La mejor morena del mundo”, afirma su amigo Danilson. Y si después de comer necesita apagar el fuego, tranquilo, enfrente está la terraza del bar O Poeta para disfrutar de una cerveza Super Bock.