Por David Lorenzo

Junto con la bandera el himno suele ser uno de los símbolos más importantes de un país. Algunos (como el español) actualmente no cuentan con letra. Pero la mayoría de países del mundo lo mantienen.

Resulta espectacular el número de veces en que los himnos son enormemente violentos. Podemos decir incluso que si los traducimos nos pueden hasta dar miedo. Pero la mayoría de esos países se niegan a cambiar las letras, ya que se ha usado desde hace generaciones.

Por lo general los himnos se eligen ya sea porque se trata de una canción popular (a veces violento) que acaba siendo aceptada como un signo de identidad de un país. Otras veces no es más que una cuestión cultural. No hay que olvidar que hasta el siglo pasado una guerra no se consideraba algo negativo. Era la mejor forma de demostrar la valía de un país.

Se han elegido 5 pero se pueden encontrar unos tantos más. Como por ejemplo:

  1. Himno de Vietnam. Comienza relativamente normal: “Soldados de Vietnam, marchando hacia delante” (Đoàn quân Việt Nam đi). Pero la cosa cambia a partir del cuarto párrafo: “Nuestra bandera, enrojecida con la sangre de la victoria, lleva el espíritu de la nación” (Súng ngoài xa chen khúc quân hành ca). Y la cosa empeora cuando dice “Nuestro glorioso camino está construido sobre los cadáveres de nuestros enemigos” (Đường vinh quang xây xác quân thù).

  1. Marsellesa. Este es el himno francés. En un principio no fue más que una canción contra Austria, después de que Francia le declarara la guerra en 1792. Posteriormente se convierte en el himno del país. Ya en el primer párrafo se le ponen a uno los pelos de punta. “¿No oís bramar por las campiñas a esos feroces soldados? (Entendez-vous dans les campagnesmugir ces féroces soldats?). Y continua diciendo “Pues vienen a degollar a nuestros hijos y a nuestras esposas” (Ils viennent jusque dans vos bras /ecorger nos fils, et nos compagnes).

  1. Himno de China. Por supuesto estamos hablando del que se aprobó después de la victoria de la revolución popular de Mao. Como la mayoría de los himnos comunistas es claramente reivindicativo “¡Levantaos, aquellos que rehúsan ser esclavos!” (qǐ lai bú yuàn zu nú lì de rén men). Aunque cuando llegamos a la segunda línea nos encontramos con esto: “¡Con nuestra carne y sangre alcemos una nueva Gran Muralla!” (bǎ wǒ men de xuè ròu).

  1. Himno de Argelia. En el caso argelino es puramente histórico. Describe claramente cómo fue la independencia del país. En su tercer párrafo dice “Oh Francia, ha llegado el día en el que tienes que rendir cuentas. Prepárate, he aquí nuestra contestación” (Ya Faransa inna tha yawmu lhisab Fasta`iddee wakhudhee minna ljawab). Pero la letra va “subiendo el tono”. Así ya casi al final dice “Nuestros restos mortales serán el tributo de nuestra gloria” (Wa Ala Ashlaina Nassnaoo Majda).

  1. Himno de Uruguay. Nada mejor que acabar con un himno en nuestro propio idioma y que no deja lugar a malas traducciones. Los uruguayos son claros cuando cantan “‘Orientales la Patria o la tumba!¡Libertad o con gloria morir!”. Pocas líneas más adelante se vuelve a hablar de la muerte “¡Libertad en la lid clamaremos y muriendo también Libertad”. No dejan lugar a dudas de la importancia que le dan a ser un país con su propia soberanía y lo importante que es luchar por él hasta el final.