Por David Lorenzo

El Fort Metal Cross forma parte de los Fuertes y castillos de Volta, considerados Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Estos castillos se encuentran localizados a lo largo de la costa de Ghana (conocida como Costa de Oro) y en ellas encontramos fortalezas inglesas, holandesas y portuguesas. El objetivo de fuertes como el de Metal Cross era tanto la compra de oro como la de trata de esclavos.

Sobre todo estas fortalezas servían para defenderse de posibles ataques tanto de otros reinos europeos como africanos. Uno de los más destacados es el Fort Metal Cross. Originariamente fue llamado Fort Dixcove y terminó de ser construido en 1698 por la Royal African Company. Esta compañía inglesa era la encargada de comerciar con esclavos negros.

La elección de la zona no fue por casualidad. La Royal African Company se percató de que las aguas en la zona de Dixcove (o Dick’s Cove) eran tranquilas gracias a una gran bahía que favorecía la protección de las embarcaciones. Esto lo convertía en un puerto ideal para pequeñas embarcaciones y canoas. Los barcos más grandes debían situarse a tres kilómetros de la costa.

Pero la tranquilidad de sus costas no se presento entre la población de la zona. Desde el comienzo tuvieron problemas con los habitantes de la zona. Esto retrasó mucho la construcción del Fort Metal Cross.

Tras su construcción logró sobrevivir a varios ataques. Los más destacados fueron los dos asaltos realizados por fuerzas prusianas, quienes habían creado una fortaleza cercana a Fort Metal Cross. A mediados del siglo XVIII comenzó una reconstrucción debido al segundo ataque prusiano al fuerte. Es en este momento en el que adquiere la forma actual. Incrementaron su tamaño.

Durante décadas fue cambiando su utilidad. En un comienzo fue, sobre todo un fuerte encargado del comercio de oro con Ghana. Sin embargo a comienzos del XVIII se hizo necesario diversificar el mercado, al caer en picado la venta de oro. Así comenzó a ser usado como zona de reparación naval y sobre todo de comercio de madera.

Sin embargo fue el mercado de esclavos el más lucrativo. Esto hizo que se convirtiera en uno de los fuertes más destacados en la trata de esclavos con dirección a las colonias británicas en América. Era tan importante para la pervivencia del Fort Metal Cross que con la abolición del tráfico de esclavos en 1807 cayó en desgracia en 1826. Pero volvió a ser recuperado en 1830 por su importancia estratégica para ocupar África.

Fueron los holandeses quienes le pusieron su nombre actual. Una vez pasó el fuerte a manos de los Países Bajos tras el Tratado Anglo-Holandés de la Costa de Oro en 1868 ellos lo rebautizaron como Fort Metal Kruiz. Aunque poco duró la ocupación de este territorio, ya que los británicos recuperaron el fuerte junto con toda la Costa de Oro cuatro años después. De esta manera quedó traducido con el nombre de Fort metal Cross.

Hoy en día el Fort Metal Cross es uno de los muchos recursos turísticos en la costa de Ghana y un recuerdo del tráfico de esclavos por parte de los países europeos.