Por Paula Albericio

El  Dr. José Luis Caballero Santana de la Clínica Perpetuo Socorro y Médico Máster en Nutrición y Dietética, nos da las pautas para cuidarnos después de una manera prudente y sana:

Si hemos aumentado de peso, no queda más remedio que ponerse con un plan de alimentación estructurado durante 2-3 semanas. Por supuesto, el organismo necesita las cantidades determinadas de hidratos de carbono, proteínas y grasas. No se trata de excluir de la dieta ningunos de ellos, sino de calcular las cantidades necesarias de calorías ingeridas para que el organismo tenga que recurrir a esa grasa acumulada durante las fiestas. La actividad física no debe parar en navidades. Si seguimos con el mismo o mayor tiempo de actividad física, nos será más sencillo mantener nuestro peso y pasar la Navidad sin tener que aflojar el cinturón.

Lo ideal es que durante las fiestas apliquemos la norma de la compensación calórica y que al final las hayamos disfrutado sin engordar: si se tiene una cena copiosa, en la comida del mediodía debería comer solo una buena ensalada con algo de embutido y una fruta, con lo cual todas esas calorías ahorradas en el almuerzo sirven para compensar el exceso de la cena. Si la comida importante fuera al mediodía, la sabia naturaleza nos lleva a hacer una cena ligera sin darnos cuenta del esfuerzo, porque es lo que organismo necesita y pide.

Las reuniones tienen como finalidad disfrutar con familiares y amigos, no es un concurso de  ver quien come y bebe más.