Por Pablo Pérez

Estamos prácticamente en la mitad del verano, por lo que aún nos quedan unas cuantas semanas de altas temperaturas. Ante esta situación a muchos nos apetecen platos frescos, ligeros y sin la necesidad de pasarnos una jornada entera en la cocina, es por ello que las ensaladas son el plato estrella. A cada uno nos vendrá una imagen de un plato determinado cuando hablamos de ellas, la ensalada a la que nos tienen acostumbrados nuestras familias, amigos, o quizás en el restaurante al que solemos ir, pero aquí les dejaremos una serie de recetas con las que podréis renovar vuestro menú personal.

1.Las ensaladas de pasta y fruta: una ensalada de pasta bastante variada y llamativa con la que no dejaremos indiferente a nadie. La mezcla de las fresas con las pipas peladas, para mi gusto es verdaderamente sabroso y si a esto le añadimos la facilidad con la que se elabora el plato es inevitable querer probarla.

2. Ensalada de pollo con frambuesas y rúcula: si prefieres una ensalada con un poco más de cuerpo y te gustan las frutas del bosque esta es tu ensalada clave. El amargor de la rúcula mezclados con el toque de las tiras de pechugas (condimentadas al gusto) y las frambuesas hacen de cada bocado una explosión de sabor.

3. Ensalada de gambas con papaya y queso: si lo que queremos es añadir ingredientes del mar, la clave está en las gambas, un ingrediente tan sabroso como versátil, que va muy bien de la mano con frutas como el aguacate o la papaya.

4. Ensalada mexicana: si os gustan los sabores picantes con este plato daréis en el clavo. Una ensalada colorida y llena de sabor, eso sí, cuidado que pica. El pollo mechado, el aguacate, las alubias y el pimiento rojo picante nos trasladarán directamente a México desde el primer bocado. A esta también se le puede añadir triángulos de maíz para dipear (enteros o desmenuzados), con los que darle un toque más de sabor.