Por Francisco Belin

Ilustración por David Ferrer

El mismo look que estila este pastelero con mil inquietudes y en constante avance profesional sugiere, ya de por sí, sabor a obrador de antaño, de repostería genuina y de toda la vida; una imagen personal que a la hora de la verdad guarda el aluvión de experiencia e ideas, de vertientes golosas que buscan también camino en la faceta competitiva. No en balde, ha sido el flamante campeón del Certamen de Repostería de Acyre Canarias.

Siguiendo sus evoluciones con medidas y moldes –ya fue finalista en el I Concurso de Repostería Harinalia 2016, en el Salón Gastrocanarias-, Daniel García del Campo llama enseguida la atención. Es innegable que esa barba característica le confiere la pátina de pastelero venerable, cuando incluso allá en su infancia ni se planteaba vínculo alguno con la restauración.

BinterNT-Chef.Junio

El jefe de la línea dulce del hotel Sensimar Royal Palm (Costa Calma), se introdujo en la panadería artesana desde los escarceos distribución hasta las sorpresas del destino, cuando se vio obligado a aprender de masas madre por un percance de su jefe.

“Había que seguir p’alante”, asevera, y a fe que esa ha sido su senda todo este tiempo: desde experimentar con queques o los rosquetes de la abuela a perseverar en cursos, stages y el entrenamiento de la creatividad.  Desde el obrador pequeñito con harinas de centeno a la convicción actual de marcar altas cotas: “me preparé para ganar”, afirma, y así que lo rubricó con el máximo galardón de Acyre Canarias, que le hará representante de la especialidad en el próximo certamen nacional.

A García del Campo le queda todo por decir en el ámbito goloso de la gastronomía.