Por Sixto Javier Pérez

Si te preguntas si esta nueva entrega es entretenida, mi respuesta es sí. Sus más de dos horas de duración son puro entretenimiento, pero al igual que en sus anteriores  películas, carece de algo tan importante como es la capacidad de sorprender y emocionar. Todo lo que he visto en La venganza de Salazar ya lo he vivido, incluso los chistes de Sparrow me parecen iguales. ¿Era necesaria otra película? Claramente, no, pero como ya sabréis estamos ante una franquicia que recauda mucho dinero. El esquema sigue siendo el mismo que en las anteriores películas, tan solo cambia el villano y algunos miembros de la tripulación.

Esta nueva entrega ha sido dirigida por Joachim Ronning y Espen Sandberg, ambos directores noruegos  suelen trabajan juntos. Su primer trabajo fue el fracaso de Bandidas con Salma Hayek y Penélope Cruz. Tras este fracaso volvieron a su país de origen con un par de producciones nacionales (estuvieron nominados al Oscar a Mejor película extranjera en 2012 por Kon-Tiki) y después se pasaron a la pequeña pantalla con la serie de Netflix Marco Polo.

Como era de esperar, el guion es muy previsible y apenas hay momentos sorprendentes. La historia tarda demasiado en arrancar ya que se detiene en explicar muchas cosas. Una vez que ya está todo explicado y toda la tripulación a bordo comenzarás a disfrutar de la película, pero ya te digo que esto sucede muy tarde. Es cierto que hay muchísimas escenas de acción que ayudan a que el entretenimiento esté asegurado. Con respecto al apartado cómico la película está repleta de chistes fáciles, algunos dan vergüenza ajena.

El gran punto fuerte de la película es el apartado técnico. Es una auténtica maravilla verla en pantalla grande. Los efectos especiales están muy bien realizados, consiguiendo escenas realmente impactantes que logran hipnotizar. El gran problema es que a mitad de la película la acción es excesiva y apenas hay momentos de tranquilidad para que el espectador pueda relajarse un poco. Lo que comienza como algo atractivo y divertido termina siendo cansino.

Los escenarios y las batallas navales están muy bien cuidados, pero me gustaría destacar la espectacular caracterización del villano interpretado por Javier Bardem así como toda su tripulación y los terroríficos tiburones fantasmas.

Me llama mucho la atención el abandono de Hans Zimmer a los mandos de la Banda Sonora. Ahora es Geoff Zanelli quien se encarga de ella, pero apenas aporta nada nuevo a este universo dominado por un tema principal totalmente reconocible, a los que también, acompañan unos arreglos musicales muy presentes en todas las producciones de la franquicia, pero a las nuevas piezas les falta algo para que los momentos de mayor acción sean realmente emocionantes, o mejor dicho, épicos.

Del reparto, destacar la presencia de Geoffrey Rush, quien representa a un verdadero pirata. Su personaje es muy creíble y será el encargado de ofrecernos la única sorpresa destacable del film.

Jack Sparrow ya cansa. Creo que el personaje está muy desgastado. Johnny Depp ha sabido meterse en la piel del pirata consiguiendo un gran personaje, pero seguir estirando a Sparrow puede ser muy perjudicial…

Javier Bardem es lo mejor de la película. Interpreta al villano Salazar, un capitán convertido en fantasma. Su personaje es verdaderamente aterrador, oscuro y malvado. Cada vez que sale en escena consigue atrapar con su presencia.

Brenton Thwaites y Kaya Scodelario son dos personajes nuevos bastante acertados ya que ofrecen un poco de frescura a la franquicia. La química entre amos es bastante llamativa, lo que ayuda a que empatices rápidamente con los dos. También aparecen en escena, muy brevemente, Orlando Bloom y Keira Knightley. Y hasta aquí puedo escribir…

En definitiva, esta nueva entrega cumple su principal objetivo, entretener. Buenos efectos especiales, espectaculares escenarios, pero su pilar fundamental, Jack Sparrow, empieza a decaer. El personaje parece repetir y hacer lo mismo que en las anteriores entregas, llegando a ser cansino. Sin duda, “una retirada a tiempo es una victoria”.

NOTA: 2,5 de 5

LO MEJOR: Salazar (Javier Bardem) y su tripulación. Los efectos especiales, las secuencias bajo el mar y los tiburones

LO PEOR: Sparrow, inicio demasiado cargado y guion previsible.