Por Salvador Aznar

La volcánica Madeira es reconocida a nivel mundial como uno de los lugares más atractivos para la práctica del senderismo, por su escarpada geografía y la belleza de sus paisajes. En la isla existen unos 2.500 km de senderos y levadas acondicionados y autorizados para la práctica de esta actividad y con ese fin, cada año, acuden miles de alemanes, franceses y escandinavos. Escarpados caminos de montaña, suaves senderos a través de la abrupta costa, frondosos bosques, la mayoría conocidos como levadas, son de fácil recorrido.

Estas levadas de Madeira son unas rutas que se realizan siguiendo el curso de los canales de agua, que fueron inicialmente construidas para el fácil acceso a los canales del personal encargado de su mantenimiento. Las levadas, toman su nombre de las levas o canales (levar, llevar) construidos en el siglo XV para transportar el agua de las altas zonas de montaña hasta los campos de cultivo, situados en las zonas medias de la isla.

Caminando a través de estos singulares senderos, se pueden apreciar magníficos paisajes y atractivas zonas agrícolas. En la mayoría de ellas, el paseo se hace de manera fácil y cómoda, aunque también existen algunas con trayectos que implican un mayor grado de dificultad, por hallarse construidas en las laderas de algunos de los altos acantilados. La práctica del senderismo a través de las levadas, se popularizo en la década de los 80.

Los numerosos senderos y levadas de la isla son de lo más diverso, según la diferentes condiciones geológicas de los lugares visitados y para poder acceder a las zonas desde donde parten estos senderos y levadas o para simplemente recorrer la isla visitando los más recónditos asentamientos humanos y sus sorprendentes rincones naturales, se hace recomendable el uso de vehículos todo-terreno y el asesoramiento de guías conocedores de las zonas.

En Madeira existen algunas empresas dedicadas a realizar este tipo de rutas que, además de los vehículos, aportan el experimentado asesoramiento de sus guías y conductores. Nosotros pudimos contar para nuestro recorrido con la valiosa colaboración de la empresa Mountain Expeditions, que con su amplio conocimiento sobre los lugares más interesantes de la isla y, cómo no, sobre las costumbres de culturales y folklóricas de sus gentes, nos mostró e introdujo en la historia y la naturaleza de esta fascinante isla de Madeira, con todo lujo de detalles.